Descendientes del hidrógeno
El origen de los elementos químicos:
La historia empieza hace unos 12.000 millones de años. Imagínense nada. Y cuando digo nada, es nada. No hay materia, no hay energía. No hay nada. No lo imaginemos como un espacio vacío porque el espacio, como concepto, tampoco existe. Tampoco existe el tiempo, el reloj no corre. Pero en esa nada, había el universo concentrado en una bola de fuego microscópica a una temperatura de unos cuatro trillones de grados centígrados. La densidad y la inestabilidad en ese punto provocaron una explosión, empezando así la expansión. A los 10 segundos de esta explosión, que llamamos Big Bang, ya se habían formado las partículas subatómicas elementales: los electrones, los protones y los neutrones. Y unos años más tarde, bueno 10.000 años más tarde, con el descenso de la temperatura, se formaron los primeros átomos o elementos químicos.
El primer átomo o elemento químico fue el de hidrógeno, con un solo electrón y un solo protón. Los átomos de hidrógeno se condensaron primero en unas nubes. Estas fueron alejándose unas de otras dando lugar a las estrellas y las galaxias. Las condiciones en el interior de las estrellas provocaron que los átomos de hidrógeno empezaran a fusionarse. La fusión dio lugar a átomos de helio, con dos electrones y dos protones. Este proceso empezó a iluminar el universo. De esta manera, cuando en el interior de las estrellas se agotaba el hidrógeno, podían seguir generando energía fundiendo también el helio y creando materiales más pesados como el carbono, el oxígeno, el silicio y el hierro.
Estos átomos, los elementos químicos, lo han creado todo. Crearon nuestro planeta hace 4.5 millones de años y, por lo tanto, toda la materia que nos rodea. El teclado con el que escribo estas líneas es materia, yo misma soy materia. Tú que estás leyendo este texto, también eres materia. Todo lo que ocupa un lugar, posee cierta cantidad de energía y podemos percibir, es materia. Materia formada únicamente por átomos.
Pero no hay ni un átomo, ni dos, ni tres… Hay más de 90 átomos distintos que lo forman todo, diferenciados por sus números de electrones y protones. Grandes científicos como Warner, Mendeleiev o Lavoisier fueron descubriendo estos elementos químicos o estos átomos y los ordenaron en la tabla periódica de los elementos. Muchos nos pueden ser familiares. El átomo o elemento sodio que nos suena por la sal que ingerimos (cloruro sódico), el elemento o átomo calcio, que lo encontramos en la leche que bebemos y en nuestros huesos, el aluminio de nuestras bicicletas que todos queremos para que pesen menos o el oxígeno que respiramos.
En resumen: la química es natural, tan natural como las estrellas.
Pero por desgracia, desconozco en qué momento, todo cambió y la palabra química se convirtió en el significado opuesto de la palabra natural. Nocivo, perjudicial o incluso muerte son palabras que se asocian con la química. Este punto de vista es erróneo porque ni lo natural es tan bueno ni lo químico es tan malo, básicamente porque no hay diferencia alguna.
Lejos de tratar de solucionar este malentendido de la sociedad actual, la industria, sobretodo cosmética y alimentaria, ha empeorado la situación y ha avivado aún más la quimiofobia. Pero no solo eso, sino que, sobre todo, se ha aprovechado del desconocimiento para ganar mucho dinero.
Es ya muy común ver o escuchar eslóganes del tipo “100% natural” o “0% químico” tanto en productos alimentarios como en productos cosméticos. Estos reclamos ya presuponen que hay una diferencia entre los productos naturales y los químicos. Como si todos no estuvieran formados por átomos. A parte de crear estas diferencias, estos eslóganes crean rechazo a otras marcas que no disponen de estos carteles en sus productos. Así que debo reconocerte que estamos delante de una de las mejores estrategias de ventas del siglo XXI.
He visto por televisión pan de molde anunciado como 100% natural, como si el pan de molde creciera de los árboles y no fuesen las levaduras quiénes, mediante una reacción química, los hicieran crecer. He visto leche enriquecida con calcio 100% natural. ¿Cuál es el calcio artificial? El calcio es calcio, un elemento químico cuyo átomo tiene 20 electrones y 20 protones. Y no puedo acabar sin mencionar el último de los ejemplos que podemos ver en televisión recientemente. El anuncio de un desodorante donde nos hacen entender que su producto no lleva ingredientes químicos. Pues yo me pregunto: si este desodorante no lleva ingredientes químicos, ¿qué lleva? ¿Puede que este hecho de la misma “nada” de antes del Big Bang…?
19 junio, 2018 @ 07:54
Eiii molt bona explicacio. M haguessin agradat mes exemples…no hi havia pensat mai